Hasta el 23 de enero se puede visitar la exposición de Santiago Mate Cisneros en la localidad vallisoletana de Pedrajas de San Esteban. La muestra recorre la carrera pictórica de este vecino del pueblo a través de 17 obras muy coloridas y vibrantes.
Santiago es un pintor autodidacta que decidió dar rienda suelta a su habilidad a partir de 2009, cuando asistió a unos talleres de pintura de iniciación. Su primera etapa pictórica está llena de dibujos a carboncillo que dieron paso a la creación de unos bodegones llenos de color. Después se decantó por el retrato, comenzando con el suyo propio. Esta es una de las obras preferidas del artista que se puede ver en esta exposición.
A lo largo de los últimos años, ha participado con varias obras en exposiciones conjuntas. Su técnica evoluciona y sus pinceladas sobre óleo al aguarrás cada vez son más coloridas. Sus creaciones son propias y, dice, que cada una de ellas está casi lista en unas 6 horas.
En 2015 ya realizó su primera exposición, con obras sobre paisajes de Pedrajas de San Esteban, sus originales bodegones y algún retrato. Actualmente acaba de ganar el primer premio del III Concurso de Pintura de FECLEM, convocatoria en la que ya en 2014 su obra fue premiada con el voto popular. Su inquietud le lleva a plantearse de cara al futuro crear un proyecto de 12 retratos de personas de la provincia y exponerlo en aquellos foros que deseen apoyar la labor pictórica de un gran aficionado y apasionado del arte.
Santiago es, además, cocinero. Aúna sus dos pasiones en cuadros como el bodegón del jamonero o en su obra los cocineros. Intenta transmitir sus pasiones a través de muestras como esta que podemos ver en Pedrajas, y participando en talleres y eventos culinarios como es el caso de la cena solidaria Sonrisas organizada esta Navidad en Valladolid en la que participó como voluntario.
Su capacidad para aprender y desarrollar sus habilidades es parte de su carácter. Y así lo demuestra en todos los ámbitos de su vida. Actualmente Santiago cuenta con los apoyos de la Fundación Tutelar FECLEM, que vela por sus derechos y protege sus intereses desde que un juez decidió modificar su capacidad y nombrar a la Entidad como sus tutores. Esta situación no ha sido motivo para frenar sus ansias de crecer ni su determinación por alcanzar sus metas.
Desde la Fundación apostamos por su trabajo y por sus capacidades artísticas. Él es un ejemplo de cómo una persona tutelada puede desarrollar sus ideas y contribuir a su calidad de vida. Con el apoyo de su familia, de sus amigos y de la sociedad en general, la integración y la eliminación de barreras se puede conseguir. Él apuesta por sus sueños, FECLEM apuesta por él.